Croquetas de jamón
En casi todos los restaurantes españoles se encuentra croquetas en sus menú. Son cremosas, crocantes y absolutamente deliciosas. No requiere muchos ingredientes para preparar esos bocaditos, sin embargo, la preparación puede ser desafiante porque la temperatura de la masa no debe ser demasiado alta cuando formas las croquetas. Eso es como la mayoría situaciones en la vida, se necesita un poco de práctica y cada vez resultan mejor. Las croquetas a base de una salsa bechamel se encuentra en España no solo con un relleno de jamón serrano. Las variaciones del relleno también son con verduras, pollo o pescados como por ejemplo bacalao. A mí personalmente me gustan más las clásicas con jamón serrano.
Ingredientes
- 5 cucharadas de harina de trigo
- 500 ml de leche entera
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 huevo
- Miga de pan
- 100 g de jamón serrano
- Aceite para freír
- 1 pizca de nuez moscado
- sal
Elaboración paso a paso
- Deja derretir la mantequilla en una olla al fuego bajo. Agrega la harina de trigo lentamente mientras de que estes removiéndolo con un batidor de mano.
- Vierte la leche poco a poco sin dejar de revolver cuando la masa empieza a broncearse. Agrega tanta leche que queda una masa pegajosa que no es líquido como una salsa tradicional de bechamel.
- Pica el jamón serrano finamente y agrégalo a la olla junto con la nuez moscada y un poco de sal. La cantidad del sal depende del jamón que estas usando porque el jamón es naturalmente salado. Mézclalo bien y déjalo enfriar.
- Para formar las croquetas, recomiendo ponerlas en el congelador una hora antes de freirlas. Forma aproximadamente 16 croquetas. Con una cuchara es más fácil formarlas.
- Prepara un bol con un huevo batido y un bol con miga de pan. Enrolla las croquetas primero al huevo y después en la miga de pan. Mientras este paso calienta una olla con suficiente aceite para freír. La temperatura del aceite debería ser bastante caliente cuando metes las croquetas. Si la temperatura está demasiado baja, las croquetas revientan antes de ser crocantes, porque la masa vuelve a convertirse en salsa bechamel. Lo que puede ayudar en este caso es ponerlas otra vez en el congelador por una hora antes de freír. Saca las croquetas cuando están doradas. Ponlas en un papel de cocina para que la grasa sobrante se pueda escurrir. Guten Appetit!
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